Cargar vehículos eléctricos en casa: ¿Qué tengo que saber?

Teniendo en cuenta la lentitud con la que se está desarrollando la red de puntos de carga públicos y que, a su vez, las tarifas de electricidad domésticas son cada vez más baratas, cargar el coche cómodamente en casa es una de las innumerables ventajas que ofrecen los vehículos eléctricos en la actualidad. Sin embargo, para poder disfrutar completamente de esta libertad, hay que tener en cuenta varias cosas.

Hemos recopilado las 7 preguntas y respuestas más importantes y, gracias a nuestros artículos con conocimientos básicos y muy fáciles de entender para principiantes, con ellas explicamos qué es necesario saber cuando se quiere cargar el vehículo en casa.

Las preguntas más importantes para la carga de vehículos en casa:

  1. ¿Un coche eléctrico se puede cargar en un enchufe normal sin más?
  2. ¿Qué potencia tiene que tener mi wallbox, 11 o 22 kW?
  3. ¿Mi cable de alimentación es suficiente o tengo que comprar algo más?
  4. ¿Cuánto se tarda en cargar un vehículo eléctrico en casa?
  5. ¿Cuánto cuesta un wallbox y su instalación?
  6. ¿Qué funciones tendría que tener mi wallbox?
  7. ¿Existe alguna alternativa a un wallbox fijo?

 

Pregunta n.º 1: ¿Un coche eléctrico se puede cargar en un enchufe normal sin más?

No todo el mundo quiere comprar un wallbox en un primer momento, sobre todo porque la mayoría de los coches eléctricos vienen de serie con los llamados «cables de carga de emergencia». Sin embargo, por muy buenos motivos, estos solo deben utilizarse en casos de emergencia y no en enchufes domésticos durante largos períodos de tiempo.

En principio, se puede cargar un vehículo eléctrico en un enchufe doméstico, pero estos no están diseñados para usarlos para una carga continua elevada durante varias horas, lo que puede convertirse en un riesgo para la seguridad, dependiendo de la antigüedad y el estado del cable y los contactos.

Si, aun así, un usuario quisiera utilizar un enchufe doméstico para la carga, esta debe realizarse con un cargador 100 % conforme a la normativa aplicable, como los wallbox móviles JUICE BOOSTER 2 o 3 air. Estos dispositivos tienen un ajuste automático de potencia predeterminado por el adaptador que se utilice en cada momento.

Otra ventaja adicional es que los JUICE BOOSTER cuentan con todas las características de seguridad necesarias, como el control activo de temperatura o la detección integrada de corriente residual, que se dispara de forma eficaz cuando se alcanza el valor predeterminado y evita que haya que comprar aparte un carísimo diferencial de tipo B.

 

Pregunta n.º 2:  ¿Qué potencia tiene que tener mi wallbox, 11 o 22 kW?

La potencia máxima a la que se puede cargar un vehículo eléctrico depende de cada coche en particular. La mayoría de vehículos que se comercializan a día de hoy se pueden cargar con una potencia máxima de 11 kW.

Además, antes de la instalación es importante saber qué normas deben respetarse, puesto que las mismas varían dependiendo del país. Por ejemplo, en Alemania, se debe notificar al operador de red la instalación de un wallbox de 11 kW. No es necesario ningún otro procedimiento de autorización complicado.

Sin embargo, con los wallbox de 22 kW, la situación es diferente, puesto que para esta potencia es necesario conseguir un permiso adicional, y este proceso puede tardar un tiempo. Es decir, el registro de un wallbox de 11 kW suele conllevar un menor esfuerzo burocrático. ¡Una muy buena noticia para todos aquellos a los que les gustan las cosas fáciles y no les apetece realizar ningún trámite adicional!

 

Pregunta n.º 3: ¿Mi cable de alimentación es suficiente o tengo que comprar algo más?

La línea de alimentación eléctrica de una casa o un garaje es un componente importante de los mismos y, por supuesto, debe tener las dimensiones suficientes para poder suministrar la máxima potencia de carga. Por ejemplo, para una potencia de 11 kW, se necesita una línea de alimentación trifásica de 400 voltios y 16 amperios.

Para averiguar si ya existe una línea de suministro adecuada para una tensión alta, se debe consultar a un profesional. Al mismo tiempo, esta persona también puede determinar si es necesaria la instalación de un interruptor diferencial (también llamado ID). En el caso de que la línea de suministro sea la adecuada, el electricista tan solo tendrá que conectar el wallbox para poder empezar a utilizarlo. Algunos wallbox, como el JUICE CHARGER me 3, ya vienen preconfigurados de fábrica (Plug & Play) y se pueden usar en un abrir y cerrar de ojos.

 

Pregunta n.º 4: ¿Cuánto se tarda en cargar un vehículo eléctrico en casa?

El tiempo necesario para completar una carga depende de diferentes factores como, por ejemplo, la potencia disponible en la línea de alimentación y la carga restante en la batería. Sin embargo, la potencia de carga es siempre el «eslabón más débil» de la cadena del proceso.

Ejemplo:

Un Tesla Modelo 3 tiene una batería con una capacidad de 80 kWh y se carga en un wallbox local de 11 kW.

En teoría, para cargarlo completamente se necesitarían más de siete horas: 80 kWh / 11 kW = 7,2 h.

Sin embargo, durante el día a día no se suele agotar por completo la batería, por lo que el tiempo de carga suele ser menor. La distancia media que recorre un ciudadano europeo es de entre 40 y 60 km al día, lo que, con un consumo medio de 17 kWh a los 100 km, supondría un tiempo de carga de menos de 60 minutos si se utiliza un wallbox de 11 kW.

Importante: Dependiendo de la tecnología de la batería que tenga instalada, es recomendable mantener el estado de carga (también conocido comoState of Charge o SoC) entre el 20 % y el 80 % para protegerla y prolongar su vida útil. Puede obtener más información al respecto aquí.

 

Pregunta n.º 5: ¿Cuánto cuesta un wallbox y su instalación?

Es difícil calcular los costes para dar una cifra fija, dado que existen diferentes factores que pueden ser decisivos, como los materiales (cables, wallbox adecuado, interruptor diferencial) o la mano de obra (montaje u obras en el hogar).

Importante: El tendido del cable y la conexión de una toma de alta tensión o un wallbox deben confiarse exclusivamente a profesionales. Durante su visita al lugar de la instalación, un electricista certificado podrá evaluar la situación del cableado ya existente, así como el esfuerzo y los costes asociados.

Consejo: Siempre es conveniente informarse a nivel local sobre posibles subvenciones para el wallbox o su instalación.

 

Pregunta n.º 6: ¿Qué funciones tendría que tener mi wallbox?

Un wallbox inteligente no es solo un «enchufe mucho mejor», sino que es un dispositivo con características que garantizan que el proceso de carga se pueda realizar de forma segura y se pueda comprobar y controlar cómodamente.

Las siguientes funciones son fundamentales en un wallbox:

  • RFID: activación mediante tarjetas RFID para la identificar al usuario
  • Medidor MID: para un cálculo de los costes más fácil y preciso en zonas semipúblicas
  • Gestión de carga: para la distribución dinámica de la potencia entre varios vehículos eléctricos
  • Comunicación con backend: distribución de la energía, gestión de los usuarios, gestión de las estaciones de carga y mantenimiento a distancia sin dispositivos adicionales

Cuando solo un número determinado de personas vaya a utilizar la estación de carga, es muy útil la activación mediante RFID. De ese modo, solo los usuarios que puedan identificarse mediante una tarjeta o etiqueta RFID podrán cargar su vehículo electrónico y, así, se les asignará exactamente el consumo de energía que realicen.

En el caso de que el wallbox esté instalado en una zona semipública (p. ej., esté destinado para que lo usen los arrendatarios o propietarios en un garaje), además de la activación mediante RFID, se puede instalar un medidor MID integrado para calcular fácilmente cuánta energía ha consumido cada uno de los usuarios.

Si en un aparcamiento más grande se cargan varios vehículos eléctricos a la vez, será necesario contar con un sistema de gestión de carga. De este modo se consigue, cuando se estén cargando dos vehículos o más simultáneamente, que la potencia se distribuya de forma dinámica y que el cable de alimentación no se sobrecargue.

 

Pregunta n.º 7: ¿Existe alguna alternativa a un wallbox fijo?

¿Sería ideal cargar un vehículo eléctrico fuera de casa con la misma seguridad que dentro de ella, donde hay un wallbox fijo instalado?

El JUICE CHARGER 2 y JUICE BOOSTER 3 air son una alternativa práctica y móvil a los wallbox fijos. Estos ofrecen la misma seguridad y capacidad de carga que una estación de carga fija montada en la pared, ¡con la ventaja de que son totalmente portátiles y que se pueden utilizar en cualquier lugar!

Con el adaptador adecuado, cualquier enchufe tradicional se convierte en una opción de carga perfecta, ya sea en casa o de viaje. Gracias al adaptador de tipo 2, el JUICE BOOSTER puede incluso usarse como un cable de carga modo 3 para estaciones de carga públicas.

Y, es más, el JUICE BOOSTER 3 air ofrece incluso la posibilidad de controlar y vigilar a distancia el proceso de carga a través de la aplicación «j+ pilot». Asimismo, se pueden utilizar hasta diez dispositivos simultáneamente gracias a la gestión de carga dinámica de smartJUICE. Es perfecto también para instalaciones más pequeñas o comunitarias con varios dispositivos.

Está bien saberlo: Si se usa un wallbox móvil, es suficiente con colocar una toma de alta tensión y, al mismo tiempo, es más rentable que instalar una estación de carga fija montada en la pared. Por ejemplo, el JUICE BOOSTER 3 air puede conectarse a cualquier enchufe con el adaptador rojo CEE16 y cargarse con una potencia total de 11 kW.

 

Lo más importante de un vistazo

En comparación con la carga en zonas públicas, la recarga doméstica puede suponer un ahorro en tiempo y dinero una vez que se dispone de la solución de carga perfecta.

Una vez más, volvemos a resumir aquí la información más importante que es necesario saber.

  1. La carga en enchufes domésticos solo debe realizarse en casos de emergencia y solo durante unas horas, ya que estos no están pensados para una carga continua de alta potencia. Sin embargo, sí que se puede sin ningún tipo de problema gracias a los wallbox que cumplen con todas las normas aplicables, como el JUICE BOOSTER, que cuenta con todas las características de seguridad necesarias.
  2. La mayoría de vehículos electrónicos pueden cargarse con una potencia máxima de 11 kW, por lo que un wallbox con estas características es suficiente para más del 90 % de los mismos.
  3. Para poder sacarle el máximo rendimiento a toda la potencia de un wallbox, es necesario disponer de la línea de alimentación adecuada. Para ello, siempre hay que contar con un electricista, el cual podrá comprobar in situ si la línea ya existente es adecuada, si es necesario ampliarla o renovarla y también podrá decirnos cuánto costará la instalación.
  4. Con una potencia de 11 kW, para cargar completamente un vehículo eléctrico con una batería con capacidad de 80 kWh se necesitan aproximadamente siete horas, lo que no suele ser el caso.
  5. Dependiendo del país, se debe comprobar si es necesario informar a la autoridad competente de la instalación de un wallbox.
  6. Entre las funciones más importantes de un wallbox fijo se encuentran la activación mediante RFID, un medidor MID, un sistema de gestión de carga dinámico, un backend (o sistema corporativo) eficiente y la posibilidad de poder acceder al mismo a través de internet o de una aplicación móvil.
  7. Como alternativa, las soluciones de carga móviles (como el JUICE BOOSTER 3 air) no tienen nada que envidiarle a los wallbox fijos en cuestiones de potencia y gama de funciones.

La elección del wallbox perfecto depende de las necesidades individuales de cada persona. Una vez se conocen los factores más importantes y los propios hábitos de conducción y carga de cada usuario (en casa o de viaje), la solución de carga perfecta se puede encontrar en un abrir y cerrar de ojos.